Quizás se trate de una obra maestra que un jóven Roman Polanski se le ocurrió dirigir por aquellos años (1967) en torno a esas viejas leyendas sobre esos personajes de ultratumba: Los Vampiros.Inspirado también en el Drácula de Bram Stoker y en ciertas producciones como Nosferatu. El Director Polaco se atrevió a parodiarlos desarrollando una historia clásica en un ambiente típico.
El baile de los vampiros nos cuenta la aventura del profesor Abronsius y su asistente Alfred por tierras de Transilvania en busca de la certeza sobre la existencia real de vampiros.
El profesor está convencido según sus teorías de que los hijos de la noche habítan por las cercanías, paran en una posada donde hay colgados ajos en paredes y ventanas, pero los lugareños aseguran que sólo se trata de meros adornos tradicionales de la región.Trás observar el rapto de la hija del posadero y el extraño comportamiento de éste, los dos protagonistas marchan trás las pistas que les llevarán a un inmenso castillo..dónde les espera el misterioso Conde Von Krolock.
Una película que conservo en mi videoteca porque me hizo gracia desde pequeño por su historia y por el tema, y sus personajes :el jefe de los vampiros con cierto parecido al Drácula de la Hammer, el jorobado como ayudante del Conde, la belleza de Sharon Tate, el profesor que se parecía a Einstein, los trajes de los vampiros, el paraje nevado y desolador, los lobos, y la música que era perfecta para introducirnos en ese lúgubre y oscuro mundo de los chupasangres.
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