Muchas veces, nos encontramos sitios con leyendas simples y que son contadas por personas que realmente
no fueron testigos de los acontecimientos. Sin embargo, la
mansión Punderson guarda una diferencia en éste sentido. Una docena de diferentes
apariciones fueron asociadas con esta mansión de estilo Inglés situada cerca de
Newbury. Pero no se obtuvo respuestas claras en cuanto a la identidad de las apariciones, ni se dio credibilidad a aquellas leyendas.

Pero una concienzuda
investigación reveló algunos hechos fascinantes que tienden a dar
credibilidad a algunos sucesos, de los cuales, muchos se remontan a más de 30 años, y que fueron vividas por gente que era
escéptica.
Una extraña historia os tengo que contar acerca de la mansión, un misterio que hace de aquel edificio,
un lugar escalofriante...
La mansión Punderson está situada cerca de un lago. Punderson recibe su nombre de
Lemuel Punderson, que se estableció allí en
1802 con su esposa
Sybal Hickox.
Una de las
preciadas posesiones de aquella mujer era
una mecedora que había traído consigo en su viaje desde Connecticut. Una vez que se establecieron aquí,
Lemuel abrió una destilería con otro socio y construyó la casa cerca del lago.

Cerca de su finca se encontraba una taberna, que fue muy popular hasta que se quemó misteriosamente en
1885. Algunos dicen que murieron hasta niños en el fuego, pero
no hay pruebas para fundamentar esta afirmación. También cerca de la mansión existía un hotel, un parque de atracciones, un zoológico y un pequeño barco de vapor. Al parecer,
aquella zona era muy atractiva para los niños pequeños y sus familias hasta que cerró sus puertas a principios de
1900. Mirando en los archivos, no se encuentra alguna historia espeluznante que esté asociado a estos lugares de entretenimiento, aunque su existencia podría explicar algunos
sucesos extraños que ocurrieron años después.
La inusual muerte de Lemuel PundersonEl señor
Punderson y su esposa están enterrados en una colina cerca del lago. No está claro lo que sucedió al Sr. Punderson, decían que era
un tipo extraño y excéntrico, la leyenda local sostiene que aquél día de su muerte, tuvo la idea de meterse dentro de una
bañera de oro y
navegar a la deriva por el lago. Pero había atado un extremo de una cuerda a la bañera y la otra a un árbol, con el fín de no alejarse mucho. Cuando quiso regresar a la orilla , fue a tirar de la cuerda, y ésta se soltó del árbol, Punderson acabó ahogándose , lo que resulta una de los más inusuales suicidios que hemos escuchado nunca.

Tras la muerte de Punderson, los bienes fueron transferidos posteriormente a la familia que acabó vendiendo la propiedad y desligándose de una posible tradición familiar.
La mansión no estaba del todo construida,faltaba una parte que no se finalizaría;
En 1929,
su último propietario perdería su fortuna en
la Gran Depresión, no pudiendo terminar el proyecto. Por esto,
se suicidó en la Mansión. Los bienes fueron traspasados al Estado en
1948.
Éste "pequeño Castillo" fue abierto al público en 1956. Habiendo sufrido luego una
segunda renovación, incluyendo una nueva ala de la mansión.
Investigando extraños sucesosFue durante los años 70 hasta principios de los 80 cuando afloraron extraños sucesos por la zona. Por supuesto, pudieron ocurrir mucho antes. Pero la primera investigación seria y su documentación de estos eventos paranormales fueron realizados por
Robert L. Van Der Velde en
1983, entrevistando a los empleados, investigando y estudiando su historia durante cinco largos años.
La
cantidad de información que
Van Der Velde descubrió parece
bastante convincente:
En 1977, una chica Afroamericana se ahogó en el lago. Un año más tarde, una caravana de gitanos que se encontraban
acampados cerca del lago, vieron una noche a "una joven mujer de negro, recubierta de algas, resurgiendo de las oscuras aguas del lago." La aparición fue vista caminando unos pocos metros antes de volver al agua y desaparecer. Éste grupo informó del incidente al Guardabosque y después de aquella visión,nunca más regresaron para volver a acampar alli.
(Foto: vista del Lago desde la Mansión Punderson)Un guardián de la mansión, que era un tipo escéptico, salió de allí "
como alma que lleva el diablo" conduciendo su vehículo hasta la casa de los Guardabosques.
Cuando éstos,al verlo
nervioso y asustado,le preguntaron por lo sucedido, el hombre respondió que su televisor se había encendido de repente, que las luces de la mansión comenzaron en ese momento a encenderse y apagarse sin explicación. Y que luego, escuchó unos
golpes fuertes y repetitivos de alguien que estaba llamando a la puerta de su dormitorio,sin haber nadie en la Mansión... Cuando abrió la puerta, lógicamente
no vio a nadie en el pasillo.

Tras ese suceso, la mansión Punderson se cerró al público en invierno, según el Guardabosques de la zona, aquél guardián - pálido y lleno de miedo - le dijo, "que no no iría más a esa mansión por las noches, que el edificio estaba embrujado"
Al guardabosques se le acabaría entregando las llaves de la Mansión,para que hiciera el favor de hacer, ocasionalmente, una
ronda nocturna por el edificio para revisar que todo estuviera en orden. Esa noche, encendió las luces de la entrada y subió la escalera principal. Y comprobó el sistema de calefacción.Por el día se encendía para el servicio de limpieza, por lo que el sitio siempre estaba a la "
temperatura adecuada" también por la noche. El guarda notó
demasiado frio en la sala, creía que ese día tendrían un problema con el sistema de calefacción. Pero, al comunicar por radio el supuesto fallo, a continuación dijo escuchar
la risa de una mujer. Cuando la risa se detuvo, el pasillo volvió a tener la temperatura adecuada, de nuevo.

Una ex empleada estaba durmiendo en una de las habitaciones de La Torre cuando ella se despertó y vio a un
hombre con barba y ropas harapientas a los pies de su cama. Su reacción fue darle una patada y echarlo de allí, pero su pie derecho lo atravesó. Seguidamente, lo vió
desaparecer a través de una pared.
No es la primera vez que aquel extraño hombre aparece, en otra ocasión otro guardián lo vió a lo lejos en el comedor. Fue a llamarle la atención y dice que lo persiguió hasta el sótano, y justo en el trastero,cuando ya no tenía salida, desapareció"
parecia que se lo había tragado la tierra".

Una noche, en época de visitas, hubo quejas de los visitantes acerca de unos
ruidos procedentes de una habitación. Sin embargo, aquella habitación estaba
vacía.
Aquella misma noche se informó de cosas extrañas, entre ellas:
lámparas que se movían solas, cuadros que se caían de las paredes y puertas que se abrían y cerraban por su cuenta.

Una
psíquica afirmaba haber hecho
contacto con un espíritu en la Torre del edificio, advirtió que uno de los espíritus se negaba a salir de la casa hasta que la mecedora no fuera devuelta. Según la descripción se trataba de aquel dueño que se quitó la vida al perder su fortuna.
Los trabajadores y
Van Der Velde se se pusieron manos a la obra para encontrar aquella
mecedora, en aquél tiempo, descubrieron una red de túneles debajo de la mansión.
A finales de una noche de
1979, tres empleados fueron testigos de haber visto "lo que era un
hombre colgado por una soga al cuello en las vigas. El hombre parecía estar vestido de "leñador" y la cuerda lo balanceba lentamente, sus dedos temblaban. La aparición duró increiblemente
tres horas, y desapareció con el sol.
Van Der Velde descubrió más tarde antíguas prendas de vestir en un lugar de la casa que estaba destinado a los trabajadores que cultivaban por los alrededores,aquello puede que tuviera algo que ver con aquella aparición.
Otro empleado dijo haber escuchado
risas de niños en una de las torres, Sin embargo, ningún niño ha sido visto.

En la escalera, el Guardabosques fue testigo de
risas y puntos fríos,
Van Der Velde se entrevistó una noche con el actual
responsable de la mansión, quien afirmó que vio aparecer a
una mujer "que usaba una anticuado capa de color gris y un vestido largo,
su ropa flotaba por las escaleras y a su paso dejaba frío el ambiente"
Un empleado también fue
testigo de la misma aparición en varias ocasiones más tarde, a veces iba acompañada de
niños corriendo a su alrededor. cuando la mujer notó que la estaba mirando, ella abrió su capa y "engulló" a los niños en ella , para perderse después.
En otra ocasión, el mismo empleado vio a una
niña vestida de rosa escondida detrás de las barandas de la escalera, que luego desapareció.
El pasillo conduce a Las suites de la Torre . El investigador,
basándose en los informes de los empleados y visitantes, parece pensar que
casi todas las habitaciones de este ala están
frecuentadas.
Sin embargo, la más notoria es la sala Windsor Suite (o,
Habitación Azul).
Según
Van Der Velde, un banquete fue celebrado en la Torre , esta suite está considerada como la habitación más frecuentada de la mansión . El
gerente informó de un inusual viento en el piso sin estar ninguna ventana o puerta abierta en ese instante. Y
puertas que se desquebrajan por si solas. Otro empleado escuchó
lamentos procedentes de una habitación vacía.
En otra ocasión,
sintió a alguien sentarse en la cama junto a él. " pude notar como los muelles del colchón se comprimian y ví una presión sobre las mantas." Otra noche, se despertó de repente con la sensación de que alguien arrojó agua fría sobre él.
Van Der Velde durante la
investigación, vió en la "Sala Azul" una antigua bañera, al rasparla, encontró restos de oro debajo de la pintura. ¿Pudo ser la legendaria bañera de oro?

Desde que
Van Der Velde finalizó aquella investigación sobre los espíritus de la mansión Punderson,
las historias parecen continuar. Los clientes se siguen quejando de ruidos que
proceden de
habitaciones desocupadas. Un joven informó de como
sintió el peso de varias personas sentadas en su cama. y las risas de niños han vuelto a ser escuchados en los pasillos. Sin haber ningún niño.
Siguen quedando muchas
respuestas sin resolver en este lugar;
La propiedad se construyó mucho después de la
guerra civil . ¿Podrían estar
vinculados aquellos espíritus a aquella época?
Van Der Velde reconoció haber encontrado también un
pasadizo secreto cerca de las principales habitaciónes que puede tener alguna
conexión con los extraños acontecimientos. También dijo que la historia del incendio que mató a los niños no tenían fundamento real.
Por otra parte, algunas de sus fuentes, entre ellas el
Guardabosques parecen ser
creíbles y no es probable que pueda tratarse de alucinaciones o simples cuentos.